Desde sus inicios, Lagarde acompañó la producción de sus vinos con un criterio de sustentabilidad a través de un modelo de gestión que promueve el respeto por las personas, la comunidad y el medio ambiente.

Uniendo la tradición e historia, con la impronta pujante y femenina de las hermanas propietarias de la bodega (Sofía y Lucila Pescarmona), Lagarde busca respetar y resaltar al máximo la expresión varietal y personalidad natural de las uvas provenientes de los viñedos propios.

Lagarde es una bodega con una convicción de promover el cuidado del medio ambiente. Reafirmando este compromiso, la bodega sigue creciendo con sus productos y cultivos orgánicos certificados. Además, la bodega cuenta con Certificación Vegana, Certificación de viñedo y bodega Sustentable, Certificación HACCP (Sistema de Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control), cumpliendo con los requisitos de estándares internacionales más reconocidos

Desde 2018, Lagarde es Empresa B, un sistema de triple impacto avalado por B-Lab, una organización global que agrupa a más de 7.000 compañías en 30 países con un único fin: crear un sistema económico inclusivo, equitativo y regenerativo para todas las personas y el planeta. Ser Empresa B implica medir el impacto social y ambiental, y comprometerse de forma personal, profesional, institucional y legal a tomar decisiones considerando las consecuencias a largo plazo de cada acción en la comunidad y el medio ambiente

El Movimiento B no es guiado por ninguna ideología o persona en particular, sino por miles de personas que quieren trabajar por un mundo mejor. El eje fundamental se basa en la creencia de que las empresas pueden ser agentes de cambio y contribuir a la solución de las grandes problemáticas sociales y ambientales.Con un alto compromiso, Lagarde asume este desafío, formando parte del movimiento global que quiere generar un cambio para dar soluciones a problemas sociales y ambientales: creer en una mejor manera de hacer vinos.

Continuando con una visión sustentable, en los últimos años se ejecutaron varias acciones de impacto, como la medición del recurso hídrico y construcción de una represa para riego controlado, la continua operación de una planta de tratamiento de efluentes, desarrollo de políticas de gestión de residuos, reciclaje, compostaje, forestación, biodiversidad y promoción del consumo responsable (Wine in Moderation).

Por otro lado, la educación es un eje central, ya que la bodega implementa constantemente programas y convenios de inserción laboral junto al Municipio y otras Entidades (Dirección General de Escuelas, Programas Municipales, entre otros), donde se fomenta el crecimiento profesional del personal técnico, con resultados muy alentadores. Lagarde trabaja incansablemente por una economía donde el éxito se mida por el bienestar de las personas, las sociedades y la naturaleza.

Desde el plano gastronómico, Lagarde se destaca por el cultivo de productos de su huerta y producción de aceite de oliva para sus restaurants (Fogón, Zonda y Criolla), de la mano de sus agricultores y cocineros. También aquí se nuclea y fomenta la educación para la comunidad gastronómica nacional, a través de talleres de cocina cuyana, ciclos temáticos y masterclass con invitados locales e internacionales, con temáticas como fermentos, producción sustentable, quesos, pastelería, ganadería regenerativa e infusiones. Asimismo, se colabora con proveedores y artesanos locales, para elementos de vajilla, telas, mobiliario y otros, priorizando el desarrollo de la economía regional.

— Augusto García

A través de prácticas estratégicas responsables y proactivas, se genera un desarrollo empresario, donde Lagarde continúa su incansable compromiso de cuidar la tierra y su gente.

Equipo Lagarde Mendoza, Septiembre 2023